¿Le rozan los aros del sujetador? Seguro que se ha preguntado alguna vez por qué le pasa. En este artículo vamos a intentar ayudarla a resolver esta duda.
Un sujetador consta de unas aros de metal o plástico que rodean el pecho y se ajustan a él mediante unos tirantes. Los aros del sujetador se ajustan al contorno de los pechos para proporcionar mayor sujeción.
¿Cómo arreglar sostén con aro?
Si el aro del sostén se sale, lo mejor es arreglarlo lo antes posible. Para ello, necesitarás un alfiletero, una aguja e hilo.
1. Haz un nudo en el hilo y ponlo por el agujero del aro.
2. Haz un nudo en el otro extremo del hilo.
3. Pasando el hilo por el agujero del aro, haz un nudo en el extremo del hilo que queda afuera.
4. Ahora, corta el sobrante de hilo.
5. Sujeta el aro con el alfiletero y aprieta el nudo.
6. Vuelve a probar el sostén.
¿Qué pasa si uso un sujetador muy apretado?
Si usas un sujetador muy apretado, puede ocasionarte dolor en los senos, problemas de circulación y fatiga.
¿Qué es bueno para la irritación debajo de los senos?
Los senos son una zona muy sensible del cuerpo, por lo que es normal que se produzcan irritaciones en esta zona. Algunos trucos para aliviar la irritación son:
-Aplicar una compresa fría sobre los senos.
-Humedecer un algodón con agua fría y aplicar sobre los senos.
-Tomar un baño de burbujas.
-Aplicar una loción calmante.
¿Qué es la candidiasis debajo de los senos?
La candidiasis es una infección causada por un hongo, el cual se llama Candida albicans. Este hongo se encuentra en la boca, el estómago y el recto de la mayoría de las personas sanas. Sin embargo, en algunas personas el hongo puede causar una infección. La candidiasis puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, pero es más común en la vagina, la boca o el recto. La candidiasis debajo de los senos es poco común.
Las mujeres se sienten incómodas cuando se les rozan los aros del sujetador. Según un estudio, esto se debe a que las fibras de los aros pueden irritar la piel. La solución es usar aros de alambre o de plástico.
Las cuerdas de los aros me rozan el pecho, provocándome una agradable sensación. Es como si me acariciara el cuerpo, transmitiéndome una descarga de placer.